
Y si...? es el lema de una nueva campaña publicitaria de una empresa inmobiliaria. En ella te invitan a arriesgarte a comprar tu casa y luego si cambia drásticamente tu vida, como por ejemplo tener que ir a trabajar al extranjero, pues te la recompran o algo así. Vamos, que no te preocupes que ellos se encargan de que dejes la puerta abierta a la novedad sin riesgos. Y vaya si saben lo que se hacen. Saben que la posibilidad de que tu vida cambie (y se vuelva apasionante) es más que poco probable. Así que seguramente no tendrán que hacer ninguna gestión, ni ocuparse de nada, porque tu vida se establecera pegada a un trabajo que (ójala me equivoque) te absorva por cuatro duros y condiciones precarias, y tú además no serás capaz de mandarlo a la mierda, aunque se lo merezca, por miedo. Miedo a muchas cosas. Miedo a la incertidumbre, miedo a que te digan que estás loco por dejar tu trabajo, miedo a no encajar en una sociedad conformista y miedo a arriesgarte y lanzarte a la piscina. No es que sea yo una atleta de salto de trampolín, pero las pocas veces que me he tirado a la piscina con los ojos cerrados me ha resultado bien, es más todo lo que recuerdo que merece la pena de lo que he hecho ha sido después de tirarme a la piscina. En el fondo creo que es una cuestión de confianza en uno mismo. Si te crees capaz, eres capaz y punto pelota. Así que al igual que en ese otro anuncio de una marca de coches en el que empiezas a echar raíces en la oficina si no te escapas, invito a todos aquellos que tengan sueños a que los cumplan, porque la vida se esfuma y no valdrá para nada la excusa de "es demasiado tarde", porque además pasado mañana será ya demasiado tarde. ¡ A espabilar !