viernes, noviembre 09, 2007

Croquetas

A Rubén no le gustan las croquetas caseras, espero que las congeladas tampoco. El otro día hice croquetas, de las que Rubén no quiso comer, y hoy le he llevado unas cuantas a Vicente. Le han gustado tanto que me ha llamado entusiasmado para felicitarme mientras se las comía.
Cada uno tiene sus gustos, ¿no? A mí desde luego me gustan las croquetas, me gustaban más las de mi madre, pero yo me estoy esforzando por hacerlas lo más parecidas posibles a las que ella hacía, deliciosas por cierto.
Vicente me ha dicho: "si no te sale lo del periodismo te puedes dedicar a hacer croquetas".
Vale, ahora mismo cambio teletipo por croqueta con los ojos cerrados. Mucho más ricas y menos agobiantes, aunque engordan más claro.
Hoy UGT nos ha convocado a los periodistas para hablar de la precariedad precisamente de la profesión periodística. Su informe, al parecer elaborado con encuestas hechas a periodistas, ha causado risa a muchos de mis compañeros (a mi también, y bastante), que no llegaban ni de lejos a los sueldos medios, ni consideraban que su criterio contara para su medio como decía el informe, ni muchas cosas más.

Así que con este panorama vergonzoso y descorazonador prefiero hacer croquetas. Me da pena que a Rubén no le gusten, pero claro, con un jefe que no me hace ni un contrato, pues la balanza de los gustos y los "disgustos" se compensa bastante.

1 comentario:

Flanagan McPhee dijo...

Pues sí, la verdad es que son las mejores que he comido (como me lea mi madre, me mata, pero eso es aparte). Ya estoy deseando que llegue la "próxima remesa". Tú las que no quiera Rubén, me las mandas a mí. Así tengo ración doble, jejeje...

Y con respecto a lo de cambiar teletipos por croquetas, casi que ganarías con el cambio. Yo me especializo en arroces (que me salen de vicio, no es por nada) y tú en croquetas y demás, y montamos un retaurante de chuparse los dedos.

Y en lugar de alimentar le ego de los políticos, alimentamos su estómago, que está mejor remunerado, al menos...