jueves, diciembre 14, 2006

Living Like A Refugee

Living like a refugee (viviendo como un refugiado), es el título del único álbum de la banda Refugee All Stars, formada por un grupo de músicos refugiados sierraleoneses que se aburrían de no hacer nada y vivir de la ayuda internacional en un campo de Guinea.
Un buen día decidieron unirse y formar una banda para animar a los miles de sierraleoneses que viven en cinco campos de refugiados en Guinea, que llegaron allí huyendo de la guerra y la barbarie del bello país del oeste africano.
Rubén y yo tuvimos la suerte de descubrirlos en Santiago de Compostela. Allí todos los noviembres se celebra el festival de cine independiente Cineuropa. Así que como no somos discotequeros nos compramos una entrada para la sesión de noche, y esa noche tocaba un sugerente título de film documental "Refugees All Stars".
Por tres euros disfrutamos de la estupenda historia de Reuben, Franco, Grace, Ibrahim, Black Nature y Mohamed, y de cómo hartos por la desidia de vivir sin sentido se decidieron a actuar, a cantar y a reivindicar sus derechos.
Y de paso se sumergieron en una gira por todos los campos de refugiados del país para animar un poco a la gente que comparte sus problemas.
Gracias a un programa de la ONU la mayoría de componentes de la banda viajó a Freetown para grabar un disco, sólo como aliciente para animarles a regresar al país, donde en 2002 se firmó una paz artificiosa que amenaza con quebrantarse en cualquier momento.
Todos menos uno, al que el miedo le venció, regresaron a Sierra Leona. Y ahora están inmersos en la promoción de su disco que les llevará de gira por EEUU como teloneros de Aerosmith.
Ahora que tengo el disco en mis manos no puedo evitar recomendarlo. No sólo por la genial historia que tiene detras, sino por la fuerza de sus canciones, su ritmo y su alegría. Un álbum delicioso y lleno de esperanzas: www.refugeeallstars.org

lunes, noviembre 13, 2006

Santiago, Cortázar y el gran batacazo

Ahora que lo pienso, caerme un superbatacazo en medio de la exposición del archivo fotográfico personal de Julio Cortázar en el Palacio Fonseca de Santiago de Compostela, tuvo su punto literario.
Me encontraba ensimismada, abobada, mirando una de las vitrinas que contenía alguna de las primeras ediciones de alguna de las obras del escritor argentino, cuando quise avanzar hacia la izquierda, posando mi pie una baldosa más alante de la anterior, lo que viene siendo andar, y de repente noté el vacío, el piso se acabó, intenté buscarlo con mi pie izquierdo un poco más abajo, pero para ese momento ya estaba volando cual angelote deformado sujetando el altar mayor de la catedral compostelana.
La cara de Rubén, medio de apuro, medio de risa, intentando cogerme todavía la tengo grabada en la mente. De repente, en medio de mi angelical vuelo di un estruendoso golpe con mi muñeca derecha en la vitrina susodicha contenedora de las obras recién publicadas. El escándalo me hizo pensar en el desastre, pero la vitrina aguantó, no sé si milagrosamente, mi golpetazo, chirrió y vibró, se movió de derecha a izquierda, y seguro se rió un poco de mí.
Ya de camino al suelo, no sé como mi torso se las ingenió para girar por completo una caída de izquierdas, y convertirla en una de derechas, cosa que creo me hizo más daño en el corazón que en el cuerpo, porque mi codo derecho se hizo fuerte y dió con los románicos suelos del palacio de piedra parando el golpe al que continuó una extensión completa del resto de las partes del cuerpo, cual deseo de adoptar posición de siesta en la playa.
Me levanté rápido, intentando buscar a ver dónde me dolía, pero nada grave, un poco de dolor de pié y una herida en el codo, eso sí, antes de buscar lesiones busqué testigos. Ni rastro, la sala, por suerte, estaba vacía, pude entrever a la chica de la exposición, sentada fuera en el patio de entrada, sin inmutarse haciendo cualquier cosa menos estar pendiente de los acontecimientos de la sala.
Rubén desde luego, fue testigo de excepción, como dicen los tópicos reportajes, y disfrutó recreando mi imagen de angelote volador el resto del día, riéndose, ya más tranquilo, después de saber que no me había roto la crisma.
El resto del día lo pasé midiendo mis pasos por los techos de la catedral, cosa que me reportó más traspiés de lo esperado, pero sin vuelos menos mal, ni hacia la plaza del Obradoiro, ni la de la Platería, ni ninguna del bello trazado urbano del centro de Santiago.

martes, noviembre 07, 2006

¡ Felicidades artista !



















Felicidades mamá. No sólo por ser una artista fortográfica sin ni siquiera saber que lo eres, sino por tu nuevo nombramiento como supervisora de radiología. Porque aunque ahora pases una época de nervios, cambios y adaptaciones, lo vas a hacer genial y sobre todo, no vas a tener que irte a Villarreal (que es muy poco glamuoroso por otra parte).
Pues eso, felicidades y a disfrutar del cargo guapa.

jueves, noviembre 02, 2006

"Trabajos"

Trabajos diferentes, situaciones peculiares, mileurismos, botellones, americanismos detestables y otros ingredientes más se unen en este blog para tratar de explicar la espeluzdante imagen de mi hermana y yo disfrazadas de novia cadáver.
Trabajos diferentes, sí, porque a parte de dedicarnos cada una a lo nuestro (medio ambiente mi hermanita y periodismo en mi caso) tenemos que trabajar en una discoteca, que para nosotras es en general un lugar odioso al que nunca acudiríamos salvo caso de primera necesidad, es decir: trabajar.
Trabajar, valga la redundancia para complementar la condición de mileurista que tantos sufrimos.
Situaciones peculiares son las que se dan cuando por una costumbre importada de EEUU, de los que bastantes cosas malas nos llegan ya sin quererlo, nos vemos obligadas a disfrazarnos la noche de Halloween, con temática Halloween. Yo le dije a mi hermana: "si se creen que voy a venir vestida de guapa o de sexi, la llevan clara".
Lo de los botellones me hace gracia en dos sentidos, primero porque si no trabajáramos en una dicoteca que dispone de una gran explanada para practicar la increíble moda no vendría tanta gente, ergo, cerraríamos. Y segundo porque no sabía si reír o llorar cuando escuché en la radio que en Sevilla se iba a hacer una manifestación para reclamar el derecho al botellón. Hojo, leed despacio lo del "derecho al botellón", a mi me dan escalofríos de pensar que esta generación de jóvenes sólo sean capaces de movilizarse por esa degradación de la persona humana.
Ale, a disfrutar de la foto.

lunes, octubre 16, 2006

En pie contra la pobreza

Queridos amigos, que día tan especial el de hoy ¿¿no??. No porque haya sido maravilloso, porque la verdad es que ha sido bastante pesado en general, sino porque hoy, aunque haya sido al menos por unos minutos, todos los medios de comunicación han hablado de la pobreza y de la necesidad de erradicarla.
Creo que hemos llegado a una situación límite. La única norma de este neoliberalismo arrollador es que no hay norma que valga. La única ley internacionalmente aceptada es la del dinero. Mientras miles de personas sufren, malviven y mueren atrapados en la miseria.
Qué pena.
También da pena no poder hacer mucho, vivir en Europa, tan moderna y con esas instituciones tan estupendas y que no hagan nada para controlar a las multinacionales que deboran todo, que imponen sus criterios de mercado y no dan opción a nadie que no sea multimillonario.
Me da pena también escuchar a la gente (algunos de ellos personas cercanas a las que quiero mucho) decir que aquí ya no cabemos más, que no podemos dejar que los inmigrantes lo invadan todo.
Por favor, creo que la peor cualidad humana es la ignorancia. Y creo que estos medios de comunicación, que hoy han sacado unos minutos de niños pobres de Sudán y de gente manifestandose en alguna capital remota del mundo, no cumplen con su función pública de informar.
Ya sé que es un debate manido y repetido, pero ¿acaso ha cambiado algo?. Cada vez estamos más narcotizados por esta sociedad que nos impone el consumo, para estar guapos, para ser más felices, para triunfar.
A fer la mà!! Yo me levanto contra la pobreza, y no hoy, me levanto cada día de la cama y voy a pensar en qué puedo ayudar yo a erradicar esa pobreza, y voy a intentar que a menos los que me lean vuelvan a pensar otra vez en el tema, vergonzoso, que hace que tantos millones de personas vivan en esta situación, mientras otros (los menos) sólo saben mirarse al ombligo.

viernes, octubre 13, 2006

Mohamed Yunus y la Paz

Hoy hemos conocido la buena noticia de que el economista nacido enn Bangladesh, Mohamed Yunus ha recibido el Premio Nobel de la Paz. Una noticia que para variar me ha alegrado mucho, especialmente porque tuve el honor de asistir a su investidura como Doctor Honoris Causa por las tres universidades valencianas el pasado junio, y compartir varios minutos de charla con él.
Yunus se mostró agradecido por el reconocimiento y nosotros aprendimos mucho de su trayectoria profesional. Después de haber estudiado en Estados Unidos y gozar de un status privilegiado como profesor de universidad, decidió volver a su país natal para ayudar a los más pobres. Y creó el Grameen bank, una entidad bancaria que concedía créditos a las familias más pobres basándose únicamente en la confianza en la gente.
Eso es lo que deberíamos hacer todos, creer un poco más en la gente y no sólo en los números y en el valor económico de las cosas. Yunus se dió cuenta que con sólo unos cuantos dólares, que para él no significaban absolutamente nada, podía hacer que un pequeño empresario emprendiera un negocio con éxito, y por consiguiente podía devolver el dinero de ese crédito al poco tiempo. Hoy son más de once millones de personas las que han mejorado su situación gracias a los microcréditos, por eso son considerados como una poderosa arma en la lucha contra la pobreza.
Así que felicidades por ese reconocimiento tan merecido y esperemos que muchos más países se sumen a esta idea de los microcréditos, porque ya se sabe "no les des un pez, dales una caña y enséñales a pescar".

miércoles, octubre 11, 2006

Atómicos

No sé muy bien en qué estaba pensando Pyongyang cuando decidió realizar la prueba atómica subterránea en Corea del Norte. Según su anuncio, leído por una estridente, y, para que nos vamos a engañar, bastante graciosa, periodista de la televisión estatal, decía que se trataba "de un momento conmovedor en el que todos los norcoreanos dan un gra paso hacia la construcción de una nación socialista grande, próspera y poderosa". Muy bonito, gracias.
En realidad esas palabras para mi tienen otro significado. Son por una parte un desafío claro a Estados Unidos, cuyo brillante presidente Bush no tuvo mejor ocurrencia que incluir a Corea del Norte en 2002 en su lista de países del Eje del Mal. Aunque ese desafío, dicen los analistas internacionales, no es más que un intento de presión para conseguir un tratado de no agresión de los citados Estados y además beneficiarse de ayudas económicas.
Vale, yo no es que sea muy lista, pero viendo un poco la tele y leyendo algo, me he dado cuenta que al tío Bush y a su pandilla les hace falta muy, pero que muy, poquito para empezar una guerra contra los "enemigos" de su mundo civilizado. Y creo que precisamente el hecho de tener armamento nuclear debe ser una buena excusa para su cruzada de conquista del mundo.
Espero que la ONU, aunque después de la decepción que me llevé con su impasividad ante el ataque de Israel al Líbano, sepa reaccionar de alguna manera, porque si no apaga y vámonos.
En fin que no sé qué le pasa a este mundo, que cada vez está más loco y en el que cada vez sus dirigentes están más grillados. Por cierto, hablando de grillados, me voy al Instituto Anatómico Forense de Castellón, a ver si me cuentan algo del marido que ayer mató a su mujer con la escopeta de caza y luego se suicidó. El orden de los factores parece que sí altera el producto. Ánimo.

martes, septiembre 12, 2006

De vuelta

Estoy de vuelta, más bien diría yo de vuelta y media. Sufriendo la depresión postvacacional entre novedades que me complican un poco más la vuelta al día a día. Vuelvo de Sénégal, viaje del que hablaré hasta cansar al personal, y me encuentro emancipada del hogar familiar y con nuevo trabajo. No es que mis padres (benditos sean) me hayan tirado de casa, es que yo me he comprado una y ya tocaba mudarse. Y no es que me despidieran del trabajo, lo hice yo y me apalabré uno nuevo, muy valientemente, para la vuelta de las vacaciones. Ahora es el momento de hacerle cara a ese nuevo trabajo y chicos, de verdad os pido que receis un poco por mí, sea cual sea vuestra religión o creencia. Esta mañana he tenido un lapsus y de repente cuando estábamos a punto de aparcar para ir a hablar con mi nuevo jefe, he leído : TOUBA en el luminoso de un comercio. Pero no, no era que estaba de nuevo en Sénégal, donde Touba (la ciudad sagrada) es el nombre más usado a la hora de nombrar un establecimiento, era Ruzafa y su oportuna multiculturalidad. Por el momento os saludo a todos de nuevo, espero que estéis bien y espero que la lluvia me ayude a despejar las ideas y sobre todo a redactar lo más ajustado posible al estilo de agencia. Besitos

viernes, agosto 18, 2006

Calor en Dakar

Calor, caos, polvo y un trafico infernal es lo que he encontrado esta manana en Dakar. Y todo esto sin poder poner acentos ni en~ies. Ahora eso si, estoy aqui, despues de tantos quebraderos de cabeza y de tantas discusiones... No es que me guste especialmente esta ciudad, aunque reconozco que apenas la conozco, valga la redundancia, pero voy a esforzarme en conocerla, quiera o no, porque debo esperar hasta el lunes para recoger mi visa para Mali. Eso si la malumorada funcionaria de la embajada maliense no me ha tomado el pelo y me ha tangado los 15.000 CFAS para comprarse una peluca nueva. En fin, que despues de un duro dia de viaje, con escala en Casablanca, y con un cambio de temperatura de 15 grados, me he plantado en Sénégal, donde a las 2;30 de la madrugada me esperaba mi guia Mamadou en el destartalado aeropuerto Léopold Seungour, con un gracioso carton con mi nombre escrito bien grande. Creo que esta tarde me piro a la piscina de un hotel de 4 estrellas a ver si me refresco un poco. Demà os cuento mas cosas. Vaya con el tecladito...

viernes, junio 30, 2006

Final de contrato


Literalmente. Y es ahora cuando acaba el contrato cuando te pones nervioso. No es igual acabar en una empresa porque no te renueven que acabar porque uno quiera, como es mi caso. Y es que ahora parece que se te olvida un poco todas las barrabasadas que te han hecho y todas las horas extra que no has cobrado. Aunque la verdad es que si haces un pelín de memoria, y no hace falta esforzarse mucho, porque una de las peores me la hicieron anteayer, te das cuenta de lo bien que vas a estar sin venir a la oficina (sin ventanas ni aire acondicionado), aguantar las histerias ajenas y la desorganización general. A los que sí voy a echar de menos es a mis compañeros de los medios de Castellón y a algún que otro político, no por su simpatía, sino por sus meteduras de pata o por sus frases magistrales. De cualquier manera, estoy segura de que mañana sentada en la playa y leyendo un libro, con las buenas expectativas y los cambios emocionantes que se avecinan, me sentiré estupendamente de haber tomado esta decisión por mí misma. Porque cuando tomas una decisión difícil en la que toma partido y opina mucha gente, cuando al fin te decides, sólo por el hecho de haber manejado la situación ya tienes que sentirte orgulloso. Y además, como ya sabéis los que me conocéis, soy de las personas a las que les gusta arriesgarse, en pro de la mejora y huyendo del estancamiento. (Aunque Rubén, hay que saber distinguir entre mejora y estancamiento: no todo lo que es oro brilla)

lunes, junio 26, 2006

Rebajas

Mientas miles de refugiados huyen de Darfur, mientras las agencias de viajes ofertan paquetes al Caribe con una intensidad proporcional al avance de la época de los huracanes, mientras siguen llegando incesantemente pateras a Canarias y mientras pasan otras muchas cosas que no salen en los telediarios, va y llegan las rebajas. Con este calor, esta humedad y con la entrada, en fechas que no en temperatura, de los días de verano, del anhelo de unas vacaciones y el trabajo cada vez más insoportable. Dice hoy un periódico local que aquí lo que más se va a vender en rebajas son los zapatos y los manteles. Vaya, los manteles. Quién lo iba a decir. Parece ser que es por el incremento de segundas residencias. Entonces yo me pregunto si la especulación desaforada, que hace de España el país donde más se construye de toda la Unión Europea, se debe a la adquisición de una casita de vacaciones. Pero luego pienso en los precios de los apartamentos de 40 metros cuadrados, que rondan los 40 millones, y llego a la conclusión de que o somos ricos, cosa que dudo, o los bancos se han vuelto locos, o nos hemos vuelto locos todos, idea que no me parece descabellada, pero que no explica lo de la riqueza. Así que hagan cuentas y miren a ver cuánto pueden gastar en rebajas, hagan todas esas operaciones de racionalización de las compras, no se dejen engañar y piensen si realmente necesitan algo. Hagan todo eso aunque luego compren lo primero que pillen, sin que les siente bien, ni lo necesiten en ningún caso. Eso sí, más barato que la segunda residencia, o que la primera en cualquier caso, siempre les va a salir.

miércoles, mayo 31, 2006

Jo no t´espere (tampoc)

Pues no, no te espero, Benedicto XVI, porque no practico ninguna religión y porque vivo en un país presumiblemente laico. Así que si por mi fuera los 30 millones de euros que va a gastar el Gobierno Valenciano en la napoleónica visita del Papa, irían destinados a cualquier otra causa que de verdad beneficiara a los valencianos. Porque si el Ratzinger tiene interés en visitar España que se lo pague él, como hace todo hijo de vecino cuando quiere ir a un sitio. Y lo peor es que creo que esta subvención de la panda de Camps es anticonstitucional, pues en la nombrada Constitución España es un país laico. Creo que estoy en mi derecho a que me devuelvan la parte de los 30 millones que me corresponde, que me hace más falta que al Papa y, ni que decir tiene, habrá mucha gente que realmente lo necesite. Por eso me parece muy interesante, y no menos graciosa, la campaña "nosaltres no t´esperem" a la que te puedes adherir simbólicamente y puedes mostrar tu desacuerdo con la faraonica visita del Padre Santo. www.jonotespere.org

jueves, mayo 18, 2006

Chema Caballero

En la conferencia impartida ayer en Castellón, Chema Caballero no dejó títere con cabeza. Desde Bush a Zapatero repartió equitativamente las responsabilidades de la situación actual de la mayoría de países africanos. Y es que, si bien Chema es conocido por su gran labor de rehabilitación de niños y niñas soldado en Sierra Leona, es menos conocida su firme actitud crítica y esclarecedora al mismo tiempo con respecto al mundo occidental. Y es que el padre javeriano comprende el lado más oscuro de la problemática entre los países ricos y los países pobres. Aunque nosotros, los que nos suponemos ricos, lo somos gracias a la explotación de otros países que se muestran indefensos ante las presiones occidentales y la incompetencia de sus líderes corruptos, países que en realidad albergan todas las riquezas "reales" de este mundo. Y entiéndase por riquezas el petróleo, los diamantes, el oro, el uranio, el cobalto y el coltán, entre otros. Chema acusó a todos y cada uno de los gobiernos democráticos españoles de vender armas a países africanos en guerra. Armas que cada vez son más ligeras y que, por lo tanto, cada vez pueden ser utilizadas por niños más pequeños. El gobierno cada año debe dar cuenta de esta venta de armas al Parlamento, pero ¿es que los representantes políticos que elegimos están ciegos?, ¿o es que ven sólo lo que les conviene?. Ni que decir tiene que el misionero también habló de las Naciones Unidas y de su abandono de Sierra Leona con la firma de la paz en 2002. Una paz ficticia e irreal, que deja al país sumido en la miseria, el hambre y la carencia total de infraestructuras de cualquier tipo, y con un caldo de cultivo de violencia que podría hacer estallar la guerra de nuevo en cualquier momento. Y los entresijos farmacológicos son todavía más estremecedores: ya hay una vacuna para la gripe aviaria y eso que ni siquiera ha mutado en humanos (patentada por una farmacéutica de George Bush), pero cada día mueren niños de paludismo y no resulta interesante para ningún laboratorio del mundo crear una vacuna. La pena, como dice Chema, es que hoy está absolutamente todo movido por el dinero, pero cuando llega la hora de verdad y haces recuento de lo que has hecho en tu vida, el dinero no contará nada entonces, y ya será demasiado tarde para resarcirse.

miércoles, mayo 17, 2006

Jirafitas

Vaya, qué calor hace hoy. Por suerte o por desgracia no es ni parecido al que pasamos en Senegal el verano pasado. Pero lo cierto es que aunque tengamos tanto calor no podemos ver esa espectacular familia de jirafas. Podemos ver otras cosas, también relacionadas con África, como la llegada de decenas de cayucos (antes pateras, y para mí barcas de pesca de la costa oeste africana) a las costas canarias, precisamente por eso, por el calor que anima a lanzarse a la aventura a miles de senegaleses. Así que así vamos, nosotros deseando ver las exóticas palmeras, elefantes y demás fauna en las tierras subsaharianas, y los africanos (o era al revés) deseando venir aquí a buscar una vida mejor. Qué paradojas tiene la vida ¿no?. Mientras no se me ocurra hacer nada mejor, seguiré mirando a las jirafitas que seguro no saben nada de cayucos ni de mundos (ni primero, ni segundo, ni tercero)

jueves, mayo 11, 2006

Debajo un botón (ton ton)

Que encontró Martín tin tin... O que encontré yo. Ya he hablado de casualidades, como la de aquel chico que leía el mismo libro que yo en el tren. Pero la verdad es que lo que me pasó hace dos días me ha dejado bastante pensativa. Hace una semana mientras venía a trabajar, perdí un botón de mi gabardina blanca. Sólo me di cuenta cuando ya estaba en la oficina, por lo que lo di por perdido. Me dio bastante rabia porque eso supondría cambiar todos los botones. En fin, el caso es que anteayer, y después de varios días de lluvia, volvía de una rueda de prensa. Al cruzar la calle (calle que queda fuera de mi ruta normal hacia el trabajo) vi un botón. Pasé de largo, e inmediatamente volví. Estaba semi enterrado en el barro, pero me pareció que era parecido a los de mi gabardina. Lo cogí, no sin asco, y lo lavé en la oficina. Cuál fue mi sorpresa cuando llegué a casa y lo comparé con los de mi gabardina: era mi botón. Igualito, el mismo, imposible que fuera de otra prenda y coincidiera que eran iguales. Así que me pregunto, ¿será un mensaje?, ¿tendrá un significado implícito que no soy capaz de ver?. No lo sé, lo que sí sé es que soy única encontrando cosas, relojes, paraguas, pulseras, dinero, pero si esto tiene algún significado oculto, la verdad es que no soy capaz de verlo. Y si es una señal, no tengo ni idea de quien me la envía. Porque ya de paso me podría enviar un buen contrato, cosa que aún me sorprendería más.

martes, mayo 02, 2006

Mi querido michelín:

Mi querido michelín, ójala fueras de caucho o simplemente no existieras. Hoy quería dedicar este blog a todos y todas aquellas que se pasan la vida proponiéndose ponerse a dieta y fallando en el intento la mayoría de las veces. A aquellas personas a las que les sobran unos quilos, a los que les sobran muchos, a los que su único michelín les acosa, a los que su pandero les planta cara y a los que la tripa se rie de ellos a la vez que crece y crece. Mientras estás frente a esa paella de 2000 calorías por ración (si es que consigues no repetir) , piensas con un convencimiento total: "mañana me pongo a régimen". Te lo crees porque la paella no te deja ver con claridad. Pero en el fondo, cuando te levantas y ves que el pantalón ya no cede más y que te aprieta los michelines, sabes que no lo conseguirás. Sabes que el lunes tendrás más hambre que nunca y que pensarás que bastantes desgracias hay en el mundo como para que tú, encima, tengas que sufrir por el régimen. Pues amigas y amigos os mando un saludo, a vosotros, vosotras y vuestros amigos adiposos y espero que un día decidan abandonarnos sin más, sin avisar y sin pasar por un régimen, y menos aún por el quirófano.

miércoles, abril 19, 2006

Y si...?

Y si...? es el lema de una nueva campaña publicitaria de una empresa inmobiliaria. En ella te invitan a arriesgarte a comprar tu casa y luego si cambia drásticamente tu vida, como por ejemplo tener que ir a trabajar al extranjero, pues te la recompran o algo así. Vamos, que no te preocupes que ellos se encargan de que dejes la puerta abierta a la novedad sin riesgos. Y vaya si saben lo que se hacen. Saben que la posibilidad de que tu vida cambie (y se vuelva apasionante) es más que poco probable. Así que seguramente no tendrán que hacer ninguna gestión, ni ocuparse de nada, porque tu vida se establecera pegada a un trabajo que (ójala me equivoque) te absorva por cuatro duros y condiciones precarias, y tú además no serás capaz de mandarlo a la mierda, aunque se lo merezca, por miedo. Miedo a muchas cosas. Miedo a la incertidumbre, miedo a que te digan que estás loco por dejar tu trabajo, miedo a no encajar en una sociedad conformista y miedo a arriesgarte y lanzarte a la piscina. No es que sea yo una atleta de salto de trampolín, pero las pocas veces que me he tirado a la piscina con los ojos cerrados me ha resultado bien, es más todo lo que recuerdo que merece la pena de lo que he hecho ha sido después de tirarme a la piscina. En el fondo creo que es una cuestión de confianza en uno mismo. Si te crees capaz, eres capaz y punto pelota. Así que al igual que en ese otro anuncio de una marca de coches en el que empiezas a echar raíces en la oficina si no te escapas, invito a todos aquellos que tengan sueños a que los cumplan, porque la vida se esfuma y no valdrá para nada la excusa de "es demasiado tarde", porque además pasado mañana será ya demasiado tarde. ¡ A espabilar !

martes, abril 18, 2006

Dolores postvacacionales


Para dar fé de mi carácter fluctuante del que hablaba el otro día voy a escribir una desesperanzadora descripción de mi estado. Me he pasado la noche practicamente en vela por un dolor de vesícula, que de forma inesperada esta vez no ha venido solo. Ha venido acompañado de un dolor de cabeza incipiente y persistente, que me ha hecho saltar de la cama a las 4.45 de la madrugada en busca de algún instrumento cortante para deshacerme de eso mismo, de la cabeza. Por suerte o por desgracia mi dolor de vesícula ha desaparecido casi por completo, pero, en este martes odioso de vuelta de vacaciones, el dolor de cabeza se ha venido conmigo a Castellón y creo que no tiene intención de dejarme en todo el día. Así que aquí estoy, medio dormida, porque para no complicar más la situación no me he tomado mi café de la mañana, con dolor de cabeza a modo de losa lapidaria, y con un aburrimiento conspicuo que va a acabar conmigo. Y además tengo unas agujetas mortales en la espalda y los brazos porque ayer, lunes de pascua, no se me ocurrió otra cosa que jugar a las paletas, sabiendo que hace demasiado tiempo que no hago nada de gimnasia. Siempre queda el consuelo de pensar que cuando estás mala del estómago (o de la cabeza, o de las dos cosas juntas) vas a adelgazar, aunque ni siquiera ahora tengo esa esperanza.

martes, abril 11, 2006

Pequeñas alegrias

Los que me conocen saben que tengo un carácter fluctuante, por decirlo de alguna manera. Esto es, que lo mismo estoy saltando de alegría que agobiadísima de todo. Creo que por suerte tengo más ratos buenos que malos. Y ahora tengo uno de esos ratos buenos. No porque esté en una oficina sin ventanas y tenga que esperar para irme a casa perdiendo el tiempo, sino porque hace un rato me decidí a hablar con mi jefe y con su mesurada comprensión y un poco de ingeniería de la mentira piadosa por mi parte he conseguido el contrato que yo esperaba y he aplazado temporalmente mi contrato fijo (que aunque parezca mentira es lo que había planeado). Así que me espera un verano en el que espero pueda cumplir un sueño de hace tiempo, o quizás dos, y eso me hace sentir mucho mejor. ¿Qué alegria no? Bueno, no creo que se entienda mucho lo que he querido exponer, pero la verdad es que me da un poco de miedo aventurarme a contar mis planes sin tenerlos confirmados. Pero con un puente por delante, con el sol que brilla hoy combinado con una exquisita brisa fresca, y un viaje (aunque sea corto) esperándome, pues veo las cosas con mucho optimismo. Espero contagiaros un poco.

lunes, abril 10, 2006

Libros

Hace poco que leía en una entrevista a Victoria Abril que prefería vivir la vida a que se la contaran los libros. Bien, felicidades para Victoria si es que es ha conseguido ser inmortal. En mi modesta opinión la vida es corta y además sólo tenemos una. Así que me parece la opción más acertada disfrutarla al máximo y tratar de vivir todas las experiencias que podamos. Ahora bien, la vida da mucho de sí, y no se limita a la que nosotros podamos o queramos vivir. Por eso en los libros puedes encontrar trozos de otras vidas, historias apasionantes y apasionadas que por suerte o por desgracia nunca podremos vivir en nuestras carnes. Así pues creo que la fabulosa actriz hubiera estado más acertada reconociendo que no le gustan los libros y ya. No hacía falta tildarlos de pedagogos y pretenciosos a la hora de enseñarnos lo que es la vida. Un libro cuenta historias, reales o ficticias, que estimulan nuestra imaginación, nos hacen compañía, nos llevan de viaje a lugares maravillosos o a lugares horribles, nos relatan los tiempos pasados y un sinfin de cosas que los hace un buen compañero. Respeto a todo aquel que no le gustan los libros, pero respeto aún más a la gente que es capaz de reconocer sus gustos aunque sean contrarios a lo políticamente correcto (todo el mundo afirma que le gusta leer, pero muchos no recuerdan el último libro que leyeron) sin tener que criticar a los pobres libros, que no tienen culpa ninguna.

viernes, abril 07, 2006

Es fin de semana...

Comienza mi particular festival. Ni mucho menos como el que pintaba el mítico (o desmítico, si es que se puede decir) Chimo Bayo, sino todo lo contrario. Al contrario que a la gente normal, a mi me espera un fin de semana de trabajo y de pocas horas de sueño, y encima diurnas, que dicen que se descansa menos. Lo dicen y es cierto, porque si tus vecinos de la calle de atrás tienen un perro de no más de un palmo de altura que produce un ruido infernal y constante cada vez que pasa algo o alguien por la calle. Este supuesto se repite con frecuencia cuando hablamos de la mañana del sábado y el domingo. Así que una que es protectora y amante de los animales se sorprende a sí misma imaginando formas de acabar con el chucho. Luego cuando te despiertas piensas que qué animal eres, pero en ese momento de duermevela te ves disfrazada de espía matando de forma limpia y sin pruebas al pobre can. En fin, que esperemos que las dos largas noches que se presentan en la recepción no sean muy moviditas, recemos para que con el calor a la gente le de agobio entrar en una discoteca cerrada. Y si viene la avalancha, pues la aguantaremos, qué remedio. Siempre nos quedará la siesta de las "Sleepy sisters" de las 6 de la mañana en el Cash Office, pero eso es otra historia.

lunes, abril 03, 2006

Primer contrato

Desde hace dos meses asisto ilusionada a la visión de miles de estudiantes franceses contra la aprobación del la ley del "primer contrato" para menores de 26 años. Con la publicación hoy de la ley, se consolida la decisión del presidente Chirac de apoyar la polémica ley del primer ministro Villepin. Aunque no entrará en vigor hasta dentro de uno o dos meses, lo hará con modificaciones, que en mayor o menor medida han sido motivadas por la actitud inconformista de la mayoría del estudiantado y la ciudadanía en general. Y me emociona ver a esos estudiantes porque precisamente es eso lo que me parecen, estudiantes, que no se conforman con las injusticias y que se han lanzado a las calles a exigir ni más ni menos lo que les corresponde por derecho en democracia, esto es la soberanía. Al margen de los rencores o los prejuicios hacia los franceses que tenemos los españoles, creo que es de aplauso, de ovación, lo que están haciendo nuestros vecinos.
Pero mi reflexión me obliga a mirarnos al ombligo. ¿Acaso pasa algo mejor en España? Puede que no sea tan evidente, que no quede registrado en una ley injusta, pero ¿qué futuro laboral tenemos los jóvenes españoles?. Renovaciónes infinitas de contratos de tres meses, un mes o una semana; jornadas laborales de diez horas sin pagar extras; imposibilidad de encontrar un trabajo digno después de obtener la licenciatura o la diplomatura; y un largo etcétera.
Me gustaría ver a los jóvenes españoles en la calle, protestando por algo que les incunve y, lo que es mucho más importante, que les nazca a ellos y no a un partido político que sólo busca la confrontación con el único fin de generar más confrontación.

viernes, marzo 17, 2006

Coincidencias

Estaba ayer sentada en el tren, inmersa en las primeras páginas de la última novela de Javier Reverte, cuando de repente alguien entró en el tren, se sento varios asientos frente a mí y se dispuso también a leer su novela.
Al pasar una página levanté la vista y me llamó la atención el color de la contraportada de la novela de ese chico que leía frente a mí. Me pareció que era como la mía, así que miré mejor la contraportada de mi libro y corroboré que el color era el mismo. Picada por la curiosidad comencé a observarle para intentar ver la portada. Él estaba realmente inmerso en la novela, así que tuve que esperar unos segundos hasta que recolocó sus piernas, levanto levemente el libro y pude ver que efectivamente en su portada había un perfil de un saharahui, como en la mía, e incluso acerté a leer el título: "El médico de Ifni".
Vaya, que casualidad ¿no? Le observé. Llevaba una camisa de cuadros, unos vaqueros y portaba una maleta, un trolley pequeño con ruedas. Leía con avidez, se mordía las uñas de cuando en cuando y no apartaba la vista de las hojas recicladas y grandes de la estupenda edición de la novela. Iba notablemente más avanzado que yo en la lectura, y me alegró ver que en apariencia le gustaba la novela, y que parecía atravesar unas páginas interesantes.
A mí también me está gustando la novela, y me hubiera gustado compartirlo con él, pero, por más que intenté que viera la portada de mi novela y reconociera en ella la suya, él no levantó la vista de su libro en todo el trayecto. Así que llegó mi parada, me levanté sin guardar el libro en el bolso, y me lancé a la última oportunidad para que me viera, pasando cerca de él y llevando la novela sujeta del brazo y pegada a mi cuerpo. Nada, ni cuenta. Así que me bajé, todavía contenta por estas casualidades con las que te encuentras en la vida y que no sabes del todo bien qué significan.

lunes, marzo 13, 2006

Un té a la menta (o a la yerbabuena, usted disculpe)

Lunes, sueño, pereza y toda una semana por delante. Haciendo un balance del fin de semana, lo mejor ha sido un té a la menta que tomamos ayer reunidos en torno a una mesita y sentados en sillones bajos. En realidad, y como especificó el propietario del lugar, no se llama té a la menta, es a la yerbabuena, pero los países francófonos dicen "a la mènthe", cuando en realidad está elaborado con yerbabuena. En fin, gracias por la información.
Ha sido lo mejor, porque para mí los fines de semana son agotadores (para el que no lo sepa algún día contaré el porqué). Así que ayer por la tarde, entramos en esa tetería, que tenía un ambiente muy animado. La música sonaba fuerte y rítmica e invitaba al baile, baile que mi hermana y yo apenas podíamos aguantar sentaditas en los sillones bajos. Las paredes eran toda una colección de cuadros con motivos marroquís y del desierto, muchos de ellos de dudosa cualidad estética, per al fin y al cabo muy graciosos. Sobre una alfombra, y después de las aclaraciones pertinentes sobre la menta y la yerbabuena, nos sirvieron un té dulce, suave y delicioso, que compartimos los cuatro y que disfrutamos en buena compañía. Recordando el sabor del té de Senegal que compartimos con nuestros recién hechos amigos y que, tanto mi hermana como yo, deseamos con impaciencia volver a visitar.

viernes, marzo 10, 2006

Cabinas


Ayer pasaba yo por una cabina telefónica, uno de esos sitios donde se puede llamar por teléfono mediante el uso de monedas.
En fin, que desde que el teléfono móvil ha invadido nuestras vidas y ha cambiado nuestras costumbres, la cabina es para la mayoría algo carente de utilidad. Pero ayer yendo hacia el tren como cada día vi la misma cabina, en el mismo cruce de calles, que, como siempre, estaba repleta de gente. Los tres teléfonos estaban ocupados, y había gente esperando. Como cada día, según me acerco puedo escuchar una parte de esas conversaciones privadas. Conversaciones que son en su mayoría en idioma extranjero. No soy experta en lengua romance, pero con una comunidad rumana tan nutrida en Castellón, el idioma rumano me es ya bastante familiar. Así que voy escuchando a esos interlocutores, la mayoría de ellos rumanos, pero entre los que también hay chinos, y colombianos. No es mi intención entender lo que dicen, cosa que me sería imposible aunque quisiera para el caso del rumano y el chino, pero les veo y me viene a la mente la imagen que tenemos de la inmigración en España. Se suele ver a la gente venida de fuera de muchas maneras, pero sobre todo como alguien que no es como nosotros, que no tiene nada que ver con nuestras vidas organizadas y establecidas, más o menos afortunadas, pero siempre nuestras.
Y creo que es un error grave. En los últimos años España no se ha visto ante la necesidad de exportar a sus habitantes en busca de supervivencia en otro país. Los que viajamos fuera es casi siempre para aprender un idioma, para hacer turismo o para desarrollar a mayor nivel nuestra carrera profesional. Pero piensen que no tuvieran para comer, que sus hijos pasan hambre y no pueden ir al colegio, que el frío o el calor extremo les supera cada día y que por mucho que quieran no hay ningún trabajo para salir de la situación. ¿Qué harían? Pues me imagino que saldrían fuera a buscar un lugar con mejores condiciones de vida, para sacar a esa familia adelante.
Así que creo que nadie debe mirar a ningún extranjero con superioridad, ni mucho menos con desprecio, porque nosotros hubiéramos hecho lo mismo. También pienso que en esa cabina no he visto a ningún subsahariano, es que no creo que tengan teléfono en casa, allí abajo en África o que quizás sus condiciones de vida aquí tampoco sean dignas como para derrochar llamando a nadie por teléfono.
En fin, que espero que poco a poco vayamos apreciando lo que tenemos y no despreciemos por sistema aquello que no estaba en nuestros patrones de vida perfectamente establecidos.

miércoles, marzo 08, 2006

Perder el tiempo

Ayer hablaba de trabajo, mejor aún, de mujeres trabajadoras. Hoy quiero dirigirme a todos aquellos que pierden el tiempo, precisamente en el trabajo.
No me estoy refiriendo a esa pérdida de tiempo voluntaria comúnmente llamada holgazanería, perrería o vaguedad, hablo de aquellos momentos, minutos, horas o días en los que uno tiene que esperar a que el proceso productivo de su empresa arranque y tenga que entrar en acción. Cuando ya has terminado lo que deberías hacer e incluso algo más, pero no puedes irte a casa sin más.
A mí por lo menos, me pasa esto. Acabo de hacer mi trabajo y parece que quede mal que me vaya a casa. Soy una persona rápida trabajando, y suelo acabar antes que mis compañeros, pero, ya se sabe, me toca quedarme haciendo como si trabajo.
Así que os invito a que os solidaricéis conmigo todos aquellos que en algún momento os veias obligados a perder el tiempo y me lo contéis. Tiempo que por otra parte es demasiado valioso para perderlo, ¿¿no creeis??

Mujeres

Hoy es el día de la mujer trabajadora, y yo me pregunto ¿no deberíamos tener fiesta hoy todas aquellas mujeres que trabajamos?
Supongo que la mayoría pensará que no, que no hay porqué tener fiesta. Pero es que hoy hace un día tan bonito en Castellón que estar en la oficina parece pecado.
Pero sea como sea, hoy es un día extraño y un tanto paradógico. Por un lado los compañeros te felicitan por ser una mujer trabajadora no sin cierto retintín y una sonrisa por debajo del bigote, ¿qué pasa?
En fin, la paradoja llega, en mi opinión, cuando todas las instituciones públicas celebran el día con lecturas de manifiestos, regalos para las mujeres, y reivindicaciones que van desde el derecho al acceso al trabajo a la eliminación de la pobreza en los países más pobres, donde las más oprimidas son las mujeres. Me parece una paradoja, porque todas esas cosas que defienden son sobradamente sabidas necesarias, pero me pregunto yo si estas instituciones mañana se acordarán de sus manifiestos a la hora de elegir a un directivo o establecer el sueldo de una nueva empleada.
Yo animo a las mujeres a colgar esos manifiestos de buenas intenciones en los despachos, fábricas, supermercados o dondequiera que trabajen para que por lo menos hagan sentir vergüenza al directivo de turno cuando fomente la discriminación femenina.
Un beso a todas y espero que paséis un buen día. A mi me quedan muuuuchas horas de trabajo (mal remunerado).

lunes, marzo 06, 2006

El primero

Mi primer comentario, por fin estreno mi blog.